
Cuautitlán, Estado de México. – Al anunciar una estrategia firme y sostenida para la regularización del comercio en el municipio, particularmente en el primer cuadro del centro histórico, la presidenta municipal Juanita Carrillo Luna reiteró su compromiso con el orden, la legalidad y la defensa de los recursos públicos.
Al encabezar un acto público, la alcaldesa señaló que gran parte del comercio establecido en espacios municipales opera en condiciones irregulares, sin pagar impuestos, sin licencias de funcionamiento, ni servicios básicos como el agua, afectando directamente las finanzas locales y a la ciudadanía.
“No puede ser que solo el 20% del comercio del centro pague lo que le corresponde. Hay tomas de agua clandestinas, negocios sin refrendos ni licencias, y muchos subarrendan espacios públicos a precios excesivos, cuando al Ayuntamiento solo pagan una cantidad simbólica. Eso se acabó”, aseveró Carrillo Luna.
La alcaldesa subrayó que esta situación, tolerada por años, no solo representa una pérdida de ingresos para el municipio, sino también una falta de equidad frente a los comerciantes formales que cumplen con sus obligaciones.
“Este gobierno no llegó a pedir favores ni a hacer negocios turbios. Llegamos a poner orden, a cuidar los recursos del pueblo y a garantizar condiciones justas para todas y todos. No vamos a permitir que unos cuantos se beneficien a costa de la mayoría”, sentenció la edil cuautitlense.
Carrillo Luna también hizo un llamado a los comerciantes que aún operan fuera de la legalidad para que se acerquen a regularizar su situación.
Asimismo, reiteró que el objetivo no es cerrar negocios, sino ordenar el espacio público y terminar con las prácticas de abuso que por años han afectado al municipio.
“Habrá quien se moleste, quien grite o acuse persecución, pero quien no tenga nada que esconder no tiene por qué temer. Aquí lo único que pedimos es que todos cumplan, como debe ser. No más privilegios ni simulaciones”, indicó.
La alcaldesa señaló que la transformación de Cuautitlán solo será posible si se rompen viejas inercias, y si todos los sectores —incluido el comercial— asumen su responsabilidad con la ciudad y su gente, Concluyó.
