* La iniciativa del Grupo Parlamentario del PVEM, coordinado por José Alberto Couttolenc Buentello, establece sanciones de hasta 339 mil 420 pesos por cada animal lesionado o muerto en este tipo de eventos.
* El documento refiere que la ciencia, la pedagogía y la conciencia ambiental han cambiado la forma en que se relacionan los humanos con los animales, transitando hacia un modelo cultural de respeto, empatía y ética.
Redacción
Toluca, Méx. – Plantea la bancada del PVEM en la LXII Legislatura mexiquense, coordinada por el diputado José Alberto Couttolenc Buentello, regular los espectáculos taurinos en la entidad para que se realicen sin sangre, prohibiendo el uso de instrumentos punzocortantes, el sacrificio del toro y las prácticas que causen lesión o muerte antes, durante o después del evento, a efecto de que solo se permitan formas de lidia basadas en técnica, destreza, música y simbolismo, sin crueldad.
Esta propuesta establece sanciones de hasta 339 mil 420 pesos (tres mil veces la unidad de medida y actualización vigente) por cada animal dañado o fallecido, en caso de violación a la prohibición de realizar eventos taurinos, novilladas, rejoneo, becerradas y tientas en las que se cause lesión de cualquier tipo a estos seres sintientes o se les provoque la muerte, sin perjuicio de las sanciones contenidas en otras disposiciones legales aplicables.
El proyecto de reforma al Código para la Biodiversidad y a la Ley de Eventos Públicos del Estado, presentado por la diputada Miriam Silva Mata (PVEM), establece que las reses destinadas a los eventos taurinos sin violencia deberán contar con una edad mínima de cuatro años cumplidos, mientras que aquellas destinadas a las novilladas deberán tener al menos tres años. Para verificar dicho requisito, la autoridad competente podrá emplear cualquier método de comprobación disponible.
También, el garantizar la protección de la integridad física del animal, se deberán proteger los cuernos del toro o novillo para prevenir lesiones a otros animales o personas y, al finalizar el evento, el toro o novillo deberá ser devuelto a la ganadería o a la persona propietaria. Se prohíbe, adicionalmente, la utilización de objetos punzantes que provoquen heridas, lesiones o la muerte del toro o novillo, como la puya, banderillas, estoque, rejón, descabellos y puntillas, por lo que solo se podrán utilizar el capote y la muleta.
Cuando se lesione o muera un toro o novillo utilizando objetos prohibidos, o excediendo los tiempos máximos que deberán establecerse en el Reglamento de los Espectáculos Taurinos en el Estado de México, procederá la suspensión del evento y, en su caso, la clausura y revocación de permisos.
El documento señala que la ciencia, la pedagogía y la conciencia ambiental han cambiado la forma en que se relacionan los humanos con los animales, transitando hacia un modelo cultural de respeto, empatía y ética.
Esta iniciativa toma como referencia experiencias en Latinoamérica, pues en Colombia desde 2024 se prohibió la muerte del toro en los espectáculos públicos, mientras que, en la Ciudad de México, en marzo de este año, se aprobaron reformas similares a las que se proponen en la entidad mexiquense con el objetivo de ofrecer espectáculos taurinos sin violencia.
Estados como Sonora, Guerrero, Coahuila, Quintana Roo y Sinaloa han avanzado en la misma dirección y han reconocido —añade— que el valor cultural no puede sustentarse en el sufrimiento animal.