**Es necesario fortalecer las políticas de protección y la colaboración entre el gobierno y la sociedad civil para garantizar que las personas defensoras puedan seguir ejerciendo su importante función social sin miedo a represalias y con el respaldo que merecen.
Redacción….
Este 9 de diciembre el Día Internacional de las Personas Defensoras de Derechos Humanos, fecha en la cual las organizaciones que conformamos el Espacio OSC, se unen al reconocimiento de la labor de defensa de quienes, con valentía y determinación, protegen los derechos fundamentales de todas, todos y todes, enfrentando riesgos y adversidades por su trabajo, por ello, renovamos nuestro compromiso con defender a quienes defienden derechos humanos.
Esta jornada recuerda los desafíos que enfrentan quienes defienden los derechos humanos, sino también la crucial importancia de esta labor para la construcción de una sociedad más justa y democrática en México.
Asimismo es fundamental reconocer los avances alcanzados, tanto por las organizaciones de derechos humanos como por las personas defensoras.
Entre las conquistas en materia de protección, de las que hoy disponen, son resultado del esfuerzo incansable de la sociedad civil organizada, especialmente en lo que respecta al Mecanismo Federal de Protección, que ha sido fruto del trabajo colectivo.
Es importante destacar que las organizaciones que conformamos el Espacio OSC, en conjunto con las personas defensoras, han sido actores clave en la creación de la Ley de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas (2012), así como en el monitoreo de su implementación, a través de propuestas técnicas que han contribuido a su desarrollo.
Mientras que el Mecanismo, que sigue siendo la única política pública institucionalizada para la protección de personas defensoras y periodistas en riesgo en el país, es un pilar esencial para la defensa de la vida y la integridad de quienes enfrentan amenazas debido a su labor.
Esto a través de su modelo de gobernanza en red, el Mecanismo ha logrado convertirse en un referente a nivel nacional y regional en América Latina.
A más de 12 años de la creación del Mecanismo, se han logrado avances significativos; sin embargo, también se debe reconocer que persisten desafíos que requieren un esfuerzo continuo por parte de las autoridades y la sociedad civil.
Con este Mecanismo se mejora en términos de cobertura y recursos humanos, aún persisten necesidades en la atención, en el fortalecimiento de aspectos técnicos y en la coordinación interna y con los Estados.
Sin dejar de lado que las amenazas y asesinatos en contra de las personas defensoras siguen siendo una dolorosa y cotidiana realidad, lo que exige respuestas más rápidas, contundentes y adaptadas a la complejidad de los riesgos.
No se debe dejar de lado un aspecto fundamental como lo es la violencia diferenciada que enfrentan las mujeres defensoras de derechos humanos y las comunidades y pueblos indígenas.
Así es las mujeres defensoras sufren riesgos particulares que no solo derivan de su labor, sino también por su condición de género.
Ya que son víctimas de violencia basada en género, acoso sexual, estigmatización y ataques tanto en el espacio público como en el privado.
Lo que hace urgente que las políticas de protección reconozcan estos riesgos específicos y ofrezcan respuestas adecuadas, adaptadas a las realidades de las mujeres defensoras.
Se debe destacar que esto mismo sucede con las comunidades y pueblos indígenas, donde la falta de reconocimiento y respeto por sus territorios y sus formas organizativas generan riesgos colectivos, específicos y diferenciados que deben ser atendidos desde un enfoque diferencial y comunitario.
Las personas defensoras no solo luchan por los derechos fundamentales, sino que somos actores clave en la construcción de paz, promoviendo la reconciliación, el entendimiento y la resolución de conflictos en un país marcado por la violencia, la injusticia y la impunidad.
Por lo anterior el Día Internacional de las Personas Defensoras de Derechos Humanos, desde el Espacio OSC reitera el llamado al Estado mexicano a: Fortalecer el Mecanismo de Protección, Ampliar los instrumentos de denuncia y protección, Establecer un plan de persecución penal, Fortalecer el diálogo y la colaboración interinstitucional, Reforzar las acciones de prevención, capacitación y sensibilización
Hoy, más que nunca, es necesario fortalecer las políticas de protección y la colaboración entre el gobierno y la sociedad civil para garantizar que las personas defensoras puedan seguir ejerciendo su importante función social sin miedo a represalias y con el respaldo que merecen.