Esta iniciativa surge después de que la Suprema Corte considerara inconstitucionales en 2018 las leyes que prohíben el consumo de cannabis, lo que en la práctica ha sido visto por algunos productores y usuarios casi como una invitación a cultivar y consumir libremente la droga.
Ejemplo de esto es el “jardín” de marihuana instalado junto al edificio del Senado, donde ciudadanos fuman la droga sin temor a ser arrestados, o algunos invernaderos en el país donde ya se está cultivando la planta a la espera de que se materialice la despenalización.
Esta iniciativa, también es apoyada por la nueva estrategia del presidente Andrés Manuel López Obrador de combatir el narcotráfico atacando las raíces sociales del fenómeno, comenzó a debatirse el viernes en una sesión conjunta de las comisiones de Salud, Justicia, y Estudios Legislativos de la cámara alta.
Se lee en comunicado emitido por la oficina del jefe de bancada en el Senado del partido oficialista Morena, Ricardo Monreal, el plan permitiría “almacenar, comercializar, consumir, cosechar, cultivar, distribuir, exportar, importar, investigar, plantar, portar, tener o poseer” el producto.
Este proyecto, que se suma otros intentos previos de regular la marihuana en los últimos años, limitaría a cuatro plantas de cannabis psicoactivo el cultivo en casa, sancionaría penalmente la posesión de más de 200 gramos de la droga y crearía un Instituto Mexicano para la Regulación y Control del Cannabis.
“Lo que todavía no está incluido es el uso del cáñamo para la industria”, en sectores como construcción o alimentación, por ser “un tema complicado”,
Una fuente legislativa destaco que ante los intereses económicos y estratégicos de los mayores comerciales regionales de México, Estados Unidos y Canadá.