**La propuesta enviada por el diputado federal Agustín García, busca reducir la contaminación en el agua con sus componentes tóxicos y así evitar la deforestación, la contracción de ríos, mares y el suelo
Cdmex.- Luego de que el Diputado Federal, Agustín García Rubio, por la Quinta Circunscripción propusiera en el 2019 el Decreto por el que se reforma y adiciona una fracción al artículo 17 de la Ley General para el Control del Tabaco, el día de ayer fue aprobada la iniciativa para que las colillas de cigarro sean orgánicas y no contaminen el agua con sus componentes tóxicos y así evitar la deforestación, la contracción de ríos, mares y el suelo, lo que viene siendo una perspectiva que beneficia a la población en general.
Detalló García Rubio, que las colillas son una fuente de contaminación y de destrucción ambiental, por la contaminación de los recursos vitales como: aire, agua, suelo, cambio climático, capa de ozono incremento de los residuos, destrucción de la pérdida de biodiversidad, entre otros; pero, a su vez, se pensaba que la preocupación ambiental era un freno al desarrollo empresarial y a la creación de empleo.
De igual manera explicó que, tanto las empresas y las administraciones por el cuidado del medio ambiente están obligados a entenderse para trabajar juntos, y lograr la ecoeficiencia, es decir, se debiera añadir cada vez más valor a los productos y servicios, consumiendo menos materias primas, generando cada vez menos contaminación a través de procedimientos sostenibles, eficientes y con riesgos menores.
El diputado federal destacó que las colillas de cigarro son un residuo de cigarro con el filtro de acetato de celulosa, derivado del plástico, que pudiera parecer un desecho insignificante, sin embargo, al terminar en el suelo tarda en degradarse hasta 10 años, por lo que son el componente número 1 de la basura humana.
Y es uno de los mayores contaminantes de los océanos aparte de los múltiples plásticos, son también las colillas de cigarro que terminan en el fondo del mar y la arena una vez que las desechas al terminar de fumar.
Así también, explicó que por pequeñas e insignificantes que parezcan, las colillas son el producto que más contamina los mares, ya que, de los 4 mil 500 millones de cigarros con filtros de acetato de celulosa que se desechan en el mundo, dos tercios de ellos terminan en el mar debido a su desecho irresponsable y potencialmente 65% de las colillas terminan en el suelo; además de que sus restos son sustancias tóxicas, como la nicotina, alquitrán, acetato de celulosa e hidrocarburos, así como metales pesados como plomo, arsénico y cianuro, que están contenidas en el filtro.
Es por ello, que se reformó y adicionó una fracción al artículo 17 de la Ley General para el control del Tabaco, donde se prohíbe:
I. La producción, el comercio, distribución, donación, regalo, venta y suministro de productos del tabaco, que no cuenten con filtros biodegradables;
II. El comercio, distribución, donación, regalo, venta y suministro de productos de tabaco a menores de edad;
III. El comercio, distribución, donación, regalo, venta y suministro de productos del tabaco en instituciones educativas públicas y privadas de educación básica y media superior, y
IV. Emplear a menores de edad en actividades de comercio, producción, distribución, suministro y venta de estos productos.
en tanto, según los estatutos el decreto entrará en vigor el día siguiente al de su publicación en el Diario Oficial de la Federación, concediéndose un plazo de ciento ochenta días contados a partir de la fecha de entrada en vigor del presente Decreto, para tener fuera de las actividades de comercio, distribución, donación, regalo, venta y suministro, los productos del tabaco que no cuenten con filtros biodegradables; además de que se deberá expedir la normatividad reglamentaria relativa al control del tabaco, para establecer la obligatoriedad de los filtros biodegradables en los productos del tabaco.