Por Alejandro Carrillo.
Valle de México.- Este imperdible título de la periodista Anabel Hernández denominado “El Traidor”, la periodista realiza una narrativa del Narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada atravez de textos compartidos por su hijo “El Vicentillo” desde una cárcel estadounidense mediante su abogado Gaxiola.
En este texto se da cuenta, del gran poder que mantiene el capo del Narcotráfico, quien mantiene una red empresarial licita que le permite, mantener una infraestructura capaz de tener presencia en los cinco continentes.
Este trabajo periodístico de Anabel Hernández, es un texto de actualidad que permite al lector dar cuenta de la situación que en materia de narcotráfico tiene el país y sus implicados desde las agencias Norteamericanas CIE y DEA quienes presuntamente habrían pactado con las cabezas del “Cartel de Sinaloa” la desproporcionada Guerra contra el Narco del sexenio del expresidente Felipe Calderón, y del cual hoy su ex Secretario de seguridad pública Federal Genaro García Luna quien se encuentra detenido por sus vínculos con el Cartel de Sinaloa en los Estados Unidos.
En “El traidor Anabel Hernández realiza un recorrido por las complicaciones que tuvo el hijo del Mayo al ser extraditado a los Estados Unidos y deja ver los vínculos con el ejército y las polícias del país para mantener una estructura organizacional que genera millones de dólares por la venta de droga en los Estados Unidos.
Así mismo “El Traidor” es una mirada para conocer la intención de Vicente Zambada Niebla, para aportar datos para el aseguramiento de narcotraficantes en México y su papel en en denominado “Juicio del Siglo” dónde testificó en contra de su compadre “El Chapo Guzmán”.
Un dato imperdible es la condición del abogado de el Vicentillo quien al tener una enfermedad terminal aporta datos a la periodista Anabel Hernández, quien de forma valiente los hace públicos en este libro.
Al final, queda la pregunta, quien realmente es el Traidor, quien testificó en las cortes estadounidenses o el Señor de la Sierra?, Juzguelo usted mismo.
